Todos los años, cada segundo domingo de setiembre, tenemos la oportunidad de celebrar junto a nuestra familia este día tan importante. ¡Este año no debe ser la excepción, todo lo contrario!
En estos tiempos tenemos diversas ocupaciones que nos mantienen distraídos gran parte del tiempo. Hoy incluso, en muchos casos, el trabajo ha invadido también nuestros hogares, dejándonos poco tiempo para compartir con nuestra familia.
Nuestra familia no solo es el grupo de personas al que estamos unidos por lazos de sangre, sino que va mucho más allá. Son las personas por las que nos esforzamos, con las que vivimos nuestras pequeñas y grandes victorias, y con las que compartimos lo bueno y lo malo.
Este año es una buena ocasión para quedarnos en casa, pensar en nuestra familia y por supuesto, pasarla bien junto a ellos. Tómate unos minutos para reflexionar: ¿Cuánto sabemos de nuestros hijos e hijas? ¿Cómo se sienten en esta situación? ¿Es posible resolver alguna inquietud? ¿Qué está en nuestras manos para mejorar la dinámica familiar? ¿Qué nuevas formas podemos encontrar para divertirnos todos juntos?
¡Haz que este domingo, día de la familia peruana, sea totalmente diferente!
